Camioneros


Escaparate Político
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Felipe Sánchez Jiménez

En la hablilla vernácula constantemente aseguran que detrás de todo conflicto hay una lana, una sotana o una fulana. En el conflicto que enfrenta en este momento la línea de transporte urbano "Choferes del Sur", con su huelga "a medias", me aseguran que están los intereses, económicos y políticos, de doña Aurora López Acevedo.

El carácter controvertido que le conocimos desde que fue titular de la Comisión del Transporte, hoy Sevitra, ha llevado a esta dama al centro de las discusiones. Hoy no es la excepción, según me dicen algunos socios de esta empresa cuya hipotética desaparición han prendido focos rojos en el gobierno. Significa la fuente de empleo más importante en el estado con más de 600 choferes y cobradores, casi igual número de camiones que reciben mantenimiento en cientos de talleres. Genera miles de jornadas de trabajo y derrama económica mayor que ninguna otra empresa.

Es una sociedad con solidez económica que se puso a prueba en el desastre social del 2006. La APPO-Cártel 22 quemó y causó daños a sus camiones provocándole pérdidas por 52 millones de pesos. El gobierno de Ulises Ruiz solo los indemnizó con dos millones de pesos y aun así no quebró. 

En la administración del gobernador José Murat, Aurora López era presidenta de la línea donde llegó a tener hasta 50 camiones, hoy solo conserva 30. 

Algunos socios comentan lo anterior. Acusan ingratitud de parte de Aurora y no dudan en afirmar que sus ambiciones políticas la han llevado a confrontar una empresa impulsada desde el seno de las familias Candiani-López-Acevedo, entre otras, que, hasta la fecha, tienen la mayor participación. Afirman que el objetivo de Aurora es "tronar" la línea para apoderarse de las rutas a través de su empresa "Transol" cuya concesión logró de manera subrepticia a través Jesús Negrete, su "prestanombres" y colaborador de confianza en la Cotran. 

Con el poder que tuvo, logró la concesión de "Transol" lo que originó un conflicto con "Choferes del Sur" el cual, hasta la fecha, se dirime judicialmente. 

Me dicen que Aurora está convencida de ganar el juicio por lo que se ha empeñado en debilitar a "Choferes del Sur". 

La mueven otras ambiciones. Quiere volver a andar el camino que la llevó a maneja la política del transporte público en el gobierno de José Murat. Aunque los socios la rechazan, insiste en presidir nuevamente la empresa. Su intención es ascender al cargo para que el gobierno o algún partido la llame a un cargo o la hagan candidata. Juega con las siglas del PRI pero también coquetea con el Morena. 

Con estas ideas ha hecho alianza con el líder nacional del sindicato FORAS, Alejandro González Forasteri cuyo repentino cambio de opinión en el manejo del conflicto laboral, despierta sospechas entre los camioneros. 

Me explican que el problema se inició al intentar poner orden en el cobro de pasaje. Proponen barras para medir el número de usuarios en cada autobús. Algunos choferes se oponen y son los que se fueron al paro. Realmente -dice la parte patronal- no hay huelga. De 505 camiones que circulan en este momento, solo han parado 34, entre ellos todos los de Aurora. De los 64 socios, sólo tres están con Aurora.

Dicen que a eso se debe la actitud violenta que han adoptado al pinchar llantas, amenazar a los choferes que no se une al paro y bloquearles el paso. 

Para acotar el conflicto, los socios han hecho las demandas correspondientes y determinaron que Aurora no participe en ninguna mesa de la comisión negociadora. 

El salto del chapulín

Los diputados de la LXIII legislatura del estado donde cada "levantadedos" cobra más de 300 mil pesos mensuales sin mayor actividad legislativa, tuvieron hace dos días una sorpresa singular. Les cortaron la energía eléctrica.

De pronto, el salón de sesiones quedó a oscuras. En el apagón, todos reaccionaron: espalda contra la pared, a cuidarse las bolsas. No es broma, así me lo aseguró uno de los propios diputados. Es que el espectro de aquel famoso carterista David Juárez, del PT y distinguido exponente del gobierno "del cambio" que encabezó el depredador Gabino Cué, rondó la sede del poder legislativo. 

Todo indica que el Congreso del estado, ha quedado estigmatizado. La actitud depredadora con que actuaron los diputados, de todos los partidos, en la legislatura pasada, los marcó. No se pueden sacudir esa anatema de improductivos, depredadores y corruptos. 

La LXII Legislatura provocó escándalos de saqueo nunca vistos en el llamado poder legislativo de Oaxaca. Robaron las obras de artes de varios salones y se llevaron hasta el equipo del gimnasio que instalaron en el mismo edificio cameral. La historia se repite. Apenas la semana pasada, un artista pictórico que expuso en ese lugar, denunció el robo de varios de sus cuadros. 

En este momento ocurre algo aberrante en la institución donde, se supone, legislan para que la sociedad viva en orden y con apego a la legalidad. Resulta que en la sede de la legalidad, hay dos responsables del área jurídica. Una que se firma como titular y otra como encargada.

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